Cambiar hábitos alimenticios no es cosa fácil, dejar el refresco, las golosinas, la chatarra, los platillos con grasa etc se nos hace muy difícil, pues llevamos mucho tiempo con la misma alimentación y generalmente no nos gusta mucho lo saudable.
Empieza por quitar alguna de las cosas nocivas, puedes empezar con el refresco, después ve introduciendo verduras haz ensaladas, que sean variadas y de distintos colores, prepara tus propias vinagretas o simplemente agregales limón. Deja de comer cosas fritas y empanizadas es mejor que hagas todo a la plancha con un mínimo de grasa. En el caso de los postres reduce las cantidades y lo mejor es que te sentirás más ligero (a).
No necesariamente debes seguir una dieta, lo importante es no mal pasarse, comer variado pero no abusar de las cantidades pronto disfrutarás de los beneficios que se reflejarán en tu salud y la de los tuyos. Una cosa que te ayudará será ir escribiendo todo lo que comes y revísalo cada semana.
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